Echaron suertes, y la suerte cayó sobre Jonás. Entonces le dijeron ellos: Decláranos ahora por qué nos ha venido este mal. ¿Qué oficio tienes, y de dónde vienes? ¿Cuál es tu tierra, y de qué pueblo eres? Jonás 1:7-8
¡A Jonás le dijeron tú no eres uno de nosotros!
Quizás tu tratas de entrar en un círculo de amigos, en un ambiente diferente pero hay un llamado de Dios en tu vida que aunque quieras huir de el, como lo hizo Jonás, los demás si lo notan.
Y eso es lo que paso en la vida de Jonás, los demás marineros se dieron cuenta de que Jonás no encajaba en ese lugar, no era uno de ellos.
Tal vez tu no encajas en algunas pláticas, en algunos chistes o en determinados estilos de vida, porque igual que Jonás tu estas huyendo del llamado de Dios, pero Él te encontrará adonde quiera que vayas.
“Nadie puede estar contigo determinado tiempo, sin trasformar su vida.”
Lo mejor que le puedes dar a una persona es darle una convicción de lo que es, y lo que puede llegar a ser, eso afecta la idea de sí mismo.
Y él les respondió: Soy hebreo, y temo a Jehová, Dios de los cielos, que hizo el mar y la tierra. Y aquellos hombres temieron sobremanera, y le dijeron: ¿Por qué has hecho esto? Porque ellos sabían que huía de la presencia de Jehová, pues él se lo había declarado. Jonás 1:9-10
Es maravilloso encontrar personas que declaren su fe, sin temor, y también que reconocen que han errado, no muchas personas se hacen responsables de sus decisiones y sus acciones, siempre tratan de excusarse en otros; pero es maravilloso ver a Jonás decir "es mi culpa".
Tomaron, pues, a Jonás y lo lanzaron al mar; y el mar cesó en su furia. Y aquellos hombres temieron en gran manera al Señor; ofrecieron un sacrificio al Señor y le hicieron votos.
Y el Señor dispuso un gran pez que se tragara a Jonás; y Jonás estuvo en el vientre del pez tres días y tres noches. Jonás 1:15-17
Si tu no estas dispuesto a obedecer, Dios buscara alguien que obedezca por ti, el pez o la ballena no hizo su voluntad, sino que cumplió con la voluntad de Dios y llevo a Jonás directamente a Nínive que era el destino original de Jonás y exactamente ahí vomito el pez a Jonás.
No permitas que tus emociones te saquen de la voluntad de Dios para tu vida.
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